Las conservas siempre han formado parte de la tradición culinaria gallega, pero en los últimos años han vivido una auténtica revolución. Ya no se trata solo de un método de conservación, sino de una experiencia gastronómica en sí misma. Las conservas gourmet están conquistando los paladares más exigentes, y en Mar de Rianxo queremos que descubras por qué.

La clave de una conserva de calidad comienza en la materia prima: seleccionamos los mejores productos del mar, como la carne de cangrejo rojo, vieira, pulpo o mejillón, en su punto óptimo de frescura. Estos ingredientes se cocinan con mimo y se envasan al natural o con salsas tradicionales en formatos de cristal que permiten apreciar su color, textura y pureza.

El proceso de elaboración es artesanal: cocción a baja temperatura, uso de ingredientes naturales, ausencia de conservantes artificiales y un riguroso control sanitario. Cada tarro es un homenaje a la cocina gallega, un bocado lleno de sabor, historia y mar.

Pero las conservas gourmet no solo son un placer para el paladar, también ofrecen versatilidad. Se pueden consumir directamente, incluir en ensaladas, servir como tapa o formar parte de una receta más elaborada. Esto las convierte en una opción perfecta tanto para hogares como para hostelería que busca calidad con rapidez.

Además, las conservas tienen una vida útil prolongada, lo que permite su almacenamiento sin necesidad de refrigeración, facilitando la logística y reduciendo el desperdicio alimentario.

En Mar de Rianxo apostamos por elevar el valor de nuestras conservas a través del diseño de envases cuidados, etiquetado elegante y una comunicación que resalte el origen, el método y el sabor. Porque comer del mar también puede ser una experiencia de lujo.